Hoy, muchísimos amanecieron con el deseo genuino de mejorar, de cambiar, de conseguir

sus más ondos, sueños y metas, pero como va pasando el día, empiezan a ser atacados

por la extraña sensación de que no lo van a lograr, es como una premonición macabra

de que este año probablemente sea otro más de eso en donde fracasas. Lamentablemente,

a estas personas solamente les quedan vestigios de los sueños que un día tuvieron no

logran recordar, como se siente una alegría genuina, porque habría que remover muchísimo

loto para encontrarla. Y a pesar de los intentos, solamente pueden pensar en los fallos

y en las veces que no lo lograron, que no hay victoria. Es así, como los empiezan bargar

una ansiedad, una patía que los encierran un estado de resignación del cual, pues no

saben salir, que en que están condenados a vivir así, pero eso no es cierto, aunque

tu mente se está ferrando a creer que no tiene opción para girar el dimón y que estas palabras

no son otra cosa más que motivación. Regala unos minutos y déjame calentarte el alma.

Déjame acompañarte en este sendero para sacarte de este estancamiento, este año, tú y yo

vamos a sender desde el derrumbén, yo he estado acompañando todas las semanas, te voy a entregar

puntos de partidas y algunas estrategias, no vas a ir solo, no vas a seguir diambulando

entre las sombras y las dudas. Vas a poner lo lín, claro que el golpe de entusiasmo no

va a ser suficiente ni hacerte promesas vacías, vas a necesitar toneladas de coraje, de estrategia,

de oración, de acción, de valentía, de sagacidad, pero lo mejor de todo es que adentro de

ti, pues ya hacen los ingredientes que producen todas esas hermosas virtudes. Vamos a comenzar

por recuperar el propósito, la esperanza, y no vas a estar extraviado, vas a salir del

exilio emocional y písico. Quiero que sepas que puedes convertir tu presente lleno de miedo

en un futuro milagroso, no es un otopía, ¿cual es tu verdadero potencial? ¿Qué puedes

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