Hola, buenos días, gracias por estar aquí en despertando podcast. Iniciemos este día presentes y conscientes. quien se puede identificar con el siguiente escenario? Dices que ya te vas a empezar a levantar un poco más temprano para tener tiempo para ti en las mañanas. Y cuando suena la alarma... La apaga 1000 veces hasta que ya tienes que salir corriendo de tu casa. O dices que vas a tomarte el tiempo de leer más cosas que te inspiren y te enseñen cosas nuevas y en cuanto tienes un ratito libre, lo pasas escroleando en redes sociales. ¿De suena? Ahora piensa por un momento en los siguientes escenarios.

Si en tu trabajo te piden conectarte a una junta a las dos, lo más seguro es que este es ahí puntual. O si quedaste en acompañar a tu mejor amiga a una cita con el médico, lo más seguro es que hay este sinfalla. ¿Por qué será que hacemos esto? ¿Por qué será que le damos más importancia a las promesas y a los acuerdos que hacemos con otras personas? Que a los compromisos que hacemos con nosotros mismos? Hay muchas posibles respuestas a estas preguntas, pero hoy te quiero hablar una de ellas, y es el respeto. Piénsalo así. Cuando cumplimos aquello que acordamos con otra persona, es porque la respetamos lo suficiente para mantener nuestra palabra. Así que, a lo mejor lo que nos hace falta para poder hacer lo mismo con nosotros, es poner en práctica el respeto que nos tenemos. A veces, tendremos a darle más importancia a las promesas que le hacemos a otras personas, que a las que nos hacemos a nosotros mismos. Pero la verdad es que nuestras promesas personales son igual de importantes, si no es que más. Si queremos realmente construir la vida que soñamos y cumplir los objetivos que nos planteamos, hay que empezar por aquí. Un factor que a veces nos puede jugar en contra en este proceso es la motivación, porque a veces llega inaltas dosis que nos llenan de energía y nos empuja a seguir adelante, pero a veces se esconden los rincones y no logramos encontrarla. En estos momentos es precisamente cuando entra en juego a la disciplina y el compromiso. Habrá momentos en los que necesitemos pausar y descansar. Eso es completamente válido y necesario. Es vital escuchar a nuestro cuerpo, mente y corazón para saber cuando es momento de parar a respirar un poco o incluso cuando hay que dar un paso atrás. Pero también hay que saber detectar cuando la apatía se está haciendo presente. Cuando llegan los miedos y las inseguridades, o cuando aparece cualquier elemento que simplemente nos esté llevando a autos abotearnos, y sí, a veces el proceso será difícil, el autocuidado y el amor propio pueden llegar a ser incómodos. Porque nos restan. Porque nos hacen salirnos de nuestra zona de confort. Pero te aseguro que este siempre será un esfuerzo que valga la pena ser. trabajar por tu bienestar te llenará de satisfacción y plenito. Así que hoy tomate un momento para estar contigo, para hacer acuerdos y comprometerte a cumplirlos. A hacer un compromiso contigo y tu bienestar.

Te lo mereces.

Que tengas un lindo día.