Muy buenas noches comunidades, gracias por acompañarnos y sean bienvenidos y bienvenidas

a las siguientes historias de encuentros con lupa normal.

Esta vez que vienen de la mano de policías y militares, cada vez es más difícil diferenciar

porque en México, al menos los militares se ven orillados a hacer trabajos policiales

y es por eso que esta recopilación lo os incluye a ambos, esperamos que la disfruten

porque son historias que nos han sorprendido mucho, que nos han asustado y que quizás

ustedes también les dejarán sin dormir, es hora de apagar la luz y dejarse llevar mi nombre

de sur y el reyes y tú ya estás escuchando relatos de la noche.

Con mucha discripción y guardando el anonimato, voy a contarles una historia muy traumática

que viví junto a algunos compañeros, hace lo mucho cuando se iniciaban los trabajos

de construcción del tren Maya en la península de Yucatan. En una zona muy alejada en medio

de la selva, lejos de cualquier población, nos reportaron de un problema, un contratiempo

que habían vivido algunos trabajadores, nos dijeron que algo los había espantado y

que no querían regresar a trabajar. Mi superior nos dijo mucho, pero quería asegurarse

de que no fueran delincuentes, algún grupo de crimen organizado, aunque no son comunes

en esa zona, o algunos pobladores que estuvieran en desacuerdo con la construcción y que los

hubieran amenazado. Así que nos trasladamos a la zona, pero asegurarnos de que los trabajadores

pudieran regresar sin correr peligro. Los cierto es que al llegar, todo se veía completamente

normal, hicimos varios recorridos de reconocimiento, no se notó nada que pudiera indicar, que

fue lo que los había asustado, que había aumentado los trabajadores, que por lo regular

son gente local, gente que conoce la zona, y aunque no encontramos nada, teníamos que

permanecer en el lugar, para asegurarnos de que pudieran volver. Decidimos hacer una

...