Comunidad en esta ocasión en este episodio, voy a compartir con ustedes una de las historias

mes aterradoras que nos han llegado, yo creo que en toda la historia de este programa

que han ocurrido en carreteras. Quiero que les escuchen y me digan que opinan, que

me digan si de verdad están impactantes, o me ha tomado quizás en un momento sensible

a punto de viajar en carretera y sintiendo que es algo que fácilmente me podría pasar a

mí, que le podría pasar a ustedes. Ya hemos hablado respecto y es que, aunque por supuesto

que nos daría miedo vivir algo en nuestra propia casa, podemos estar preparados porque

estamos en nuestro espacio, en nuestro lugar seguro. Podemos salir a hablar con los vecinos,

llamar a alguien para que nos acompañe, no sé, o algo así. Y si nos ocurre en nuestro

trabajo, tenemos la esperancia de que el turno termine, de platicarlo con los de mes,

y si tenemos suerte, no vamos a pasar la experiencia a solas. Pero, si vamos en carretera,

si atravesamos un camino solitario. ¿A quién? ¿A quién le pedimos ayuda? Aunque

vayamos con alguien más con nosotros, en ese momento estamos completamente solos. Así

que bienvenidos, bienvenidas, y por favor, escuchen con mucho cuidado la siguiente historia.

Mi nombre es Uriel Reyes, te agradezco como siempre escuchar, porque ya estás entrenando

en los siguientes, relatos, de la noche.

Hola Uriel, esta es la tercera vez que escribo esta experiencia. Me es algo difícil pensar

que alguien más pueda saberla, que alguien más se escucha la historia. Sobre todo

que alguien no me crea, me da mucho miedo eso por alguna razón, y es por eso que esto

lo saben solo algunas cuantas personas, de la mayor confianza para mí. Tres veces

la he escrito, y apenas me atrevo a pressionar el botón de enviar. Recuerdo que las dos veces

anteriores, por alguna razón, intenté esconder ciertos detalles, hace el relato más creíble

...