Esto rambulante, Soedaniel Alarcón. La historia de estas dos mujeres colombianas empieza casi igual.

A sus esposos, ambos militares retirados con alrededor de 45 años les llegó una ferta laboral a mediados de 2023.

Pues un un día cualquiera me dijo que les han ofrecido trabajo.

En México yo le dije como así, en trabajo de qué. El me dijo que es muy bueno porque es para dar la seguridad a unas plantaciones y tricas,

yo le dije yo no estoy ya acuerdo porque a lo que esperamos la el tiempo y la

pensión para que estuvieramos juntos para que entonces usted contigo en la misma

situación.

Y es que después de más de 20 años de servicio de estarse moviendo todo el tiempo por

diferentes zonas del país de combatir en los años más duros del conflicto colombiano, de superar

el riesgo de dejar a sus esposas viudas y a sus hijos guerfanos, volver a trabajar y en

otro país no les parecía una buena idea.

Ahora no es que tuvieran problemas económicos graves, pero aunque ellos tenían pensión por sus años en el ejército, era mucho menos que el sueldo que recibían cuando estaban activos.

Por eso, ganarse alrededor de dos mil dólares mensuales,

solo por cuidar unos cultivos desítricos, no solo a mal.

La promesa era que a los seis meses ya estarían de regreso en Colombia.

Solamente es por seis meses, tranquila mórmale,

es para ver si no salimos de las teodas que tenemos. Yo he hecho cuentas

con la ayuda de Dios y yo le voy a ayudar para que usted monte un negocio. Me digo que lo

hubiéramos como una oportunidad muy buena de una estabilidad que le iba por la Unidad

de Ciudad de Nino y que ya y que hecho nos llevamos a parcer a por lo que es hora de que es un o o leñentán un paseo y, mejor dicho, ya no estás pagando maletas, ¿y esto?

No había muchos más detalles. La oferta les había llegado en diferentes momentos

por grupos de WhatsApp de militares retirados.

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