Buenos días.

Gracias por estar aquí en despertando podcast.

Iniciemos este día presentes y conscientes. Hoy quiero decirte algo que no sé si has escuchado antes, pero que es muy importante

que tengas presente.

Tú no eres tus pensamientos.

Yo sé, a lo mejor es una idea un poco difícil de procesar, pero no te preocupes, ahorita

te lo voy a explicar con calma.

Una de las cosas con las que muchas personas batallamos en nuestro día a día es con nuestra

mente.

A veces podemos llegar a sentir que está súper saturada, que tenemos pensamientos que

no sabemos cómo manejar e incluso llegamos a poner todo tipo de etiquetas a partir

de los pensamientos que tenemos. Por ejemplo, si nuestra mente tiene pensamientos negativos,

creemos que eso nos convierte en personas pesimistas y apáticas,

cuando no necesariamente es el caso.

Te explico por qué.

Tu mente ha aprendido a hacer las cosas de una manera específica por cierto tiempo.

Desde tus primeros años de vida, has absorbido muchísima información del mundo que te rodea

y a partir de eso vas aprendiendo a vivir, hacer y a comportarte.

Entre todas esa información que has interiorizado, tu mente aprendió a funcionar y a reaccionar ante el mundo de cierta forma.

Es importante entender que casi todo esto pasa a nivel inconsciente y sin que te descuenda.

De pronto un día tu mente ya tiene ciertos patrones a los que vuelven ocasiones similares,

ya creó pensamientos automáticos que te visitarán de vez en cuando y desarrolló sus propios hábitos.

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