Estaba en mi trabajo en la funeraria cuando me dispuse a meter el cuerpo de una jogana

crematorio, sin embargo no lo grababa a levantarlo, ni siquiera con la herramienta que utilizamos

para los cuerpos más pesados, recordo de algo que me habían dicho, cuando un cuerpo

se vuelve más pesados de lo normal es que no se quiere ir y por alguna razón sentí

que no se quiere ir y por alguna razón sentí que no estaba solo.

Muy buenas noches comunidades, es un gusto poder recibirlos de no

a cuenta aquí, en este espacio donde hemos reunido algunas de las historias más

aterradoras que ustedes nos han hecho llegar. Así que espero, como siempre les sigo,

encontrarlos con el mejor humor para asustarse y si no es así, la misión es que durante los

siguientes minutos olviden por completo los problemas y las preocupaciones allá fuera.

Un saludo especial a todas las personas que nos escuchan trabajando y les agradecemos que nos dejen acompañarles durante

su jornada. ustedes no apaguen la luz, pero también, dejen se llevar por los siguientes

relatos de la noche.

Me llamo Pablo Rivera y quiero contarles algo muy breve.

Hoy decidí llevar a mis tres hijos al pantheon familiar.

Lo hice porque es un año falleció mi papá de creanza y quería ver como estaba su tumba.

Nosotros no vivimos en Honduras, pero el pantheon de la familia queda cerca del pantheon

del pueblo.

Cuando llegamos a paquer el carro, pero solo yo me bajé para revisar si el portón estaba

abierto.

No lo estaba.

Cuando regresé al carro le dije a mis niños que empezaron a desayunar, con lo que deshabía comprado, en lo que veía como entrar.

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