Hola, buenos días.

Gracias por estar aquí and despertando podcast.

Iniciamos este día presentes y conscientes. Hoy quiero hablarte de algo que aunque a veces puede parecer complicado

o doloroso es necesario para poder seguir adelante. Quiero hablarte sobre cerrar ciclos y soltar a que yo que ya no nos deja avanzar.

A lo largo de la vida, nos encontramos con situaciones, personas y experiencias

que en su momento fueron importantes, que nos enseñaron, que nos hicieron sentir con mucha vida, que

marcaron una antes y un después en nuestra historia. Sin embargo, llega un punto en

el que nos damos cuenta de que esas mismas cosas que antes nos nutrían, ahora nos pesan, nos

frean y nos impiden seguir creciendo.

Cerraron ciclo no significa olvidar o negar lo que fue, todo lo contrario.

Es honrar el pasado, reconocer lo que nos dio y también aceptar que ha cumplido su

propósito.

Desapegarse no es una tarea sencilla.

Especialmente cuando lo que estamos dejando atrás está profundamente

arraigado en nuestra identidad o en nuestro día a día.

Pero ¿sabes qué? Es necesario.

Porque solo soltándolo viejo, podemos abrir espacio para lo nuevo.

El desapego no es un acto de rechazo, sino de liberación.

Se trata de soltar con amor, con gratitud, con la certeza de que todo lo que hemos vivido

ha sido parte de nuestro camino, de nuestro aprendizaje.

Sin embargo, hay momentos en los que aferrarse a algo que ya no nos mutre, puede impedirnos

avanzar, crecer y evolucionar. Es importante entender que no todas las personas, situaciones o experiencias están destinadas

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