Imagínate tú, un niño que vivió eso y que sobrevivió, jamás va a poder entrar ahí.

O simplemente que supo que hay pasó.

Esa parte de la escuela por decirlo así, está ya inutilizable.

Ella es Simel da García, periodista del periodico al día Dallas.

Cuando hablamos con ella,

Imel da estaba en Ubalde,

la pequeña ciudad del sur de Texas,

donde la semana pasada,

dos profesoras y 19 niños fueron asesinados en un tiroteo

masivo en una escuela primaria, 17 personas quedaron heridas.

Entonces, lo que los padres y algunos familiares están pidiendo y la propia comunidad te lo

dice, es que esa escuela la deberían de rirar y si al menos no la escuela, porque se quedarían

si no la escuela, por lo menos esa esa área del escuela y hacer ahí un memorial para

nuestros niños que se fueron. Ubalde es una ciudad pequeña donde viven más de 15 mil personas.

Me da me cuenta que en la comunidad donde fue el tiroteo todo mundo se conoce.

La verdad, realmente cuando alguien te dice todo mundo se conoce aquí es verdad.

Entonces uno le contó al otro lo que pasó, entonces no hay manera de separar la historia de Robo Elementar y de su comunidad.

La tragedia los atraviesa a todos,

según reportes locales y no tiene un familiar que trabaja o estudia en la escuela,

al menos conoce a alguien que si lo tiene.

Es decir, no hay una área de la ciudad que no se haya visto impactada por esto. Y según imeldad, la cercanía entre las personas de esta comunidad ha resultado tanto una

bendición como una maldición desde el tiroteo.

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