Ahhhhh, uhhhhh, uhhhhh

¡Ay, yo esta mal!

Estamos listos para lo que Dios nos va a dar, ¿sí o no?

¡Buen!

Durante el año que me tocó trabajar en la cadena CNN, CNN,

recuerdo que entreviste al actor y comediante mexicano Carlos Villa Gram

los Villagran y en un momento le pregunté cómo estaba atravesando la cuarentena, estamos en Plena

Pandemia. Y a lo que el respondió con la voz de su querido personaje Quico, me infló en los

cachetes y me dijo, ¿por qué pandemia, mi ablas? Lo que dijo, esto es pandemia.

Dijo, ¿por qué pandemia?

Plan de mío. Yo se lo me son récordesmente y continúe con la entrevista, pero apenas terminé

el programa recibir desde la sede central de Atlanta un extenso correo de parte de los directivos

o parte de ellos de CNN, diciéndome que no debía haber permitido semejante ex abrupto.

Que debía haberla dicho al cómico que se retractara en el acto. Y yo dice que es un cómico,

es un comediante y además en una democracia todo el mundo está libre de opinar lo que quieran,

todo el caso era la opinión del entrevistador o no del entrevistador. Pero yo estaban considerando

cancelar mi programa por providencia divina luego no lo hicieron. Así que en mi siguiente emisión

al aire ellos me pidieron, me pidieron amablemente que debería invitar una experta en infectología para

dejar claro que el virus no era una conspiración y que sí había que tomar una serie de precauciones.

Yo no estoy haciendo un juicio de valor en mí, me atrevería nunca decir que fue una conspiración,

pero sí conserva que el correo como prueba de lo que estoy diciendo. Y ese día yo descubrí de

primera mano lo influenciable es que podemos ser con las noticias o con los medios de comunicación que

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