Yo les he venido a salvo por el ancho de acollotepec y usted para servirle. como el mire lo va a contar un relato que de todo mis estudias de como no son años

ven a haber estado de poblados y eso es el ingeniero

el suelte que estrange como no son sean migos

y ya sabéis verán como las tiendas no hay que ser

el en la poca de los elotes y se nos ocurrió

de ser más fácil y de comprender los tres que decidimos, se robaron dos celotes al campo. Si, vamos,

vamos a caminar,

no sé si conozco la, la cartera de la México torla.

Sí como no, pero supuesto.

Pues por ahí yo no va a arrancar,

y si vamos, entre que nos juntamos dos celotes,

otros fueron a cortar la niña para prendas,

y dos darnos, Nosotros nos fueron a cortar la línea para aprender y tostarlos.

Ya nos metimos y les buscamos con peñeros y quedaron a aprender a la poca.

Nos resuelve que salimos y está una pequeña joyita y nos daba la flamueta.

Y entonces nos echamos a que te lo aselotes.

Nos estén pensando frío.

No, está voluéndonos grande.

Y entonces, un truco. que nos están dando frío. No, está pariéndomo, si grande.

Y entonces, un trasferno a acharlo celotes, dijimos vamos a echarlo a excepción a tostar

mi interesante, nos empezamos a recostar en el paz y no faltó que vos va a decirnos,

creer que nos aparece una guá, no saló una bruja, yó a nos, no entesa de que cosas, no es ese, atravesando los elotes,

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