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Advertencia. Este programa contiene casos de crimen, apariciones, misterio, conspiración y violencia.

El contenido de estas piezas puede ser sensible para algunos miembros del público.

Aconcejamos discreción.

12 de octubre de 1978. Otor Chelsea. Habitación 100. Es de madrugada.

Si, se levanta de la cama después de haberse enoqueado a sí mismo con una cantidad absurda

de estupefacientes. No recuerdo nada, pero tiene una corazónada muy amarga. Se levanta el baño y lo

que encuentra es una postal que marcaría el resto de su vida. Su novia Nancy, ya sé en el suelo,

ensangrentada, sin pulso. Es imposible saber cuantas horas lleva muerta. Nancy

ponga en muere a los 20 años, apuñalada, en circunstancias misteriosas en el baño de la habitación

del hotel Chelsea en la que vivía con su pareja, Sid Pichus. Él, a su vez, muere a los 21, devastado y

carcomido por la culpa. Es una sobredosis letal de heroína, la que pone fin a la breve vida de esta

gran leyenda del punk. Este es uno de los crimenes sin resolver favoritos de la opinión pública,

los documentalistas y los aficionados de la música. Quizás por el recuerdo que se tiene de la

pareja como un símil de Romeo y Julieta en fermizos y modernos. Quizás por los retratos románticos

y pasionales que se han hecho de ellos en el cine, la música y la literatura. O quizás,

porque recordar a Sid y Nancy es también recordar una escena del Bretton que enciernes,

con una violencia y energía nunca antes vistas, y una lista de personalidades que terminaron por

invertirse en leyendas. ¿Qué es lo que es detrás de la fascinación por esta trágica historia?

¿Cuáles son los detalles sordidos que acompañan este relato? Ella es recordada como un

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