¡Vamos!

¡Esta es mi amigo! ¡Esta es mi mano!

¡Estamos listos! Digan, comigo, estoy listo, si o no.

Este es el primer mensaje del,, del 2025, quiero que sepas que todo lo que diré hoy

lo he procesado con mucho cuidado,

casi de manera quirúrgica, porque amo a la iglesia

y he dedicado gran parte de mi vida a servir al cuerpo de Cristo.

De hecho, llevo 38 años haciendo esto

y mi interés primordial nunca es ser ir sus

actividades, nunca. Si no a ayudar a que nos liberemos de la cautividad de la

religión, ayudar a que podamos ser libres de las cadenas que a veces nos atan,

nos dejan vivir la gracia de Dios y además me aseguré concientemente,

intencionalmente de pasar este mensaje por el tamiz,

por el colador del discernimiento, del sentido común,

de mi propia humildad. Y estoy más que convencido que durante este año

que estamos comenzando de manera espiritual, orgánica,

tenemos que proponernos madurar y acceder a un nuevo nivel de crecimiento,

de insisto, de madurez, de solidez.

Es un año que está bueno para decir, tengo que estar en un nivel superior al año

que se acaba de ir en todo sentido.

Yo hace poco estaba leciendo que todos somos analfabetos en alguna área, todos.

Todos somos ignorantes en alguna área.

...