Lo llamaría de positas flores en la tumba de su padre, quien pudiera ser quien asesinó a su hija hace 23 años, cuando era una quinceañera.

La complicada trama comenzó en la madrugada del 6 de Amarzo de 1993, en la casa de sus abuelos y sus tres tíos en las piedras, y que ubiquen la calle que fue autizada con el nombre de la víctima, Luis Celis Rivera Torres.

Fuymos hablar con Doña Fela, quien todavía vive en la casa, escenario del crimen.

¿La Felita de Walter Soto le on de Telemundo?

No, no.

¿Es bien breve lo que queremos hablar con usted?

Gracias, gracias, gracias, buen día, buen día.

¡Saludos, espero que te encuentren bien!

Hoy te olvidó una de un misterioso caso sin resolver, ocurrido hace casi 30 años.

Este caso fue muy sonado a mediados de los años 90, particularmente en el área de este depuerto rico,

y recientemente fue cubierto en varios medios de radio, televisión y en algunas redes sociales.

Varios personas me escribieron para que trabaja este caso, y aunque para ser honesto, prefiero trabajar caso ya resueltos, decidí hacerlo.

Tengo que decirles que las fuentes de información en este caso son a veces repetitivas, otras veces incompletas, y en muchos casos como confiables.

Lo que sí es cierto es que este es un caso sumamente intrigante e impactante.

En este episodio hablamos del misterioso asesinato de la joven, Licelli's Libera Torres.

Este episodio contiene el diálogo que han sido dramatizados.

La joven, Licelli's Libera Torres, era un estudiante de 15 años, que vivía en el Vario Collores del Pueblo de las Piedras en Puerto Rico.

Su padre, Claudio Rivera, era hijo de un conocido comerciante de la área de Maunavo, y su madre, María José Fatores,

era estilista y luego se convirtió en Maestra, a pesar de que su padre vivía juntos, aproximadamente un año antes de los hechos de este caso,

la joven, Licelli, se estaba quedando a dormir en la casa de sus abuelos maternos, ya que su tía feliz, en también vivía ahí y que no tenía hijos, ni estaba casada,

se ofreció a llevarla al colegio a un otro edad en Cahuas, a donde Licelli estudiaba mientras sus padres trabajaban.

En la casa también vivía un tío de Licelli, que tenía 41 años, pero que tenía la capacidad mental de un niño de 2-4 a 7 años.

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