te gustaría dejar de sentirte agotado a agotada cada semana,

persiguiendo, tarea sin fin, pero sintiendo que en realidad no estás avanzando demasiado,

o te gustaría terminar tus días satisfechos, satisfecha con la certeza

de que has hecho un trabajo importante,

en vez de simplemente estar tachando actividades de una lista que nunca se termina,

o a lo mejor te gustaría lograr grandes resultados,

pero sin perder tu salud, tu equilibrio personal, tu vida fuera del trabajo,

a lo mejor ha llegado a creer que trabajar más horas equivale, avanzar más y aún así,

rara vercientes que acaba salgo verdaderamente significativo, que importe, de verdad.

Si algo de esto que he dicho te resuena, hoy tengo un mensaje poderoso para ti,

y es que

no es tu culpa. Y no está solo, no está sola la manera en la que la sociedad, especialmente

en el mundo empresarial actual, nos dice que debemos ser productivos, eso está roto,

nos han vendido la idea de que estar siempre ocupados, es símbolo de éxito, de avance,

de progreso, pero, y si estar continuamente corriendo,

fuera precisamente lo que te aleja de tus logros mayores. Imagínate un modelo de productividad en el

que menos, pero de verdad, menos es más, donde no importa cuántos iméils contestas ni cuántas

reuniones tienen, sino que la calidad y la profundidad de tu trabajo es lo que importa, un modelo en el que lo importante son los resultados duraderos y el tiempo de concentración plena.

No el frenesí, no el agotamiento crónico.

Hoy voy a presentarte esa alternativa disruptiva, es un camino para que alcances grandes sueños

sin sacrificar la vida que deseas fuera de la oficina.

Hoy vamos a hablar de Slow Productivity de Productivity

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