¡Oh!

¡Quieres decirle que tú eres a la...

¡Uno, no, no, no!

Imagina que quieres ayudar a una persona,

como recién lo veíamos en imágenes,

y te arriesgas a extender tu mano con compasión.

Tu motivo es muy puro,

es noble, pero aparece alguna envidioso

diciendo que lo estás haciendo para hacer teber,

cuestionas tus motivaciones,

dice, pero porque lo contaste,

porque lo grabaste, porque lo filmaste.

Y nada de lo que hagas o digas,

va a cambiar la opinión del críticom,

te hace ver como un entrometido, como un manipulador

y escriben las redes, ¿qué decepción?

¿No? ¿Qué decepción? ¿Qué pena?

O digamos que tu amiga,

tu mejor amiga está metida en un lío financiero,

y sientes que deberías hablar con ella,

porque no es la primera vez que se endeuda de esta manera,

y dices, si suis la amiga, le tengo que decir,

...