Bueno, muchas gracias.

Estoy muy bien.

Y estoy para servir la angélica.

Mire, yo vivía en la calle de aquí de Salvatierra por la secia.

Y entonces está una muñeca tirada a la secia.

A la puerta gada cuenta la puerta así tirada, pero dentro de la secia.

Pero bonita. por la secia y entonces está una muñeca tirada a la secia a la puerta de cuenta la puerta

si tirada pero dentro de la secia pero bonita la mona muñeca bonita y entonces pues yo

le dije a mi espósira recogirla vamos a abañarla y la vestimos y la metimos.

Cuando ya la teníamos ahí en la casa, la mía, la triadía y el sumona,

vía y la triad cargada.

Y me dice el otro niño que estaba más grande, que no la quería,

porque la mamuñeca se levantaba y se reía muy feo y caminaba.

Sola.

Sola.

Baja. y se arreía muy feo y caminaba. Sola. Sola.

Ma, ya.

Y le dije yo no, no dije a mentiras y siempre se crea

a costar conmigo en mi cama.

Porque él decía que oía la muñeca.

¿Qué la tenía él?

Seis años.

...