pueden escucharnos en el podcast del Noticier Univisión, un podcast de Uforia, con la cobertura

más detallada desde el lugar de los hechos.

Del lunes a viernes les traeremos las noticias más importantes para nuestra comunidad

de Ispanago. El Teniente Charles Taylor no quiere admitirlo, pero está completamente desorientado. Estén los callos, las Bahamas, el Colfo de México, y a pasar un casi cuatro horas desde que los cinco bombardeiros a Venger de la Marina de los Estados Unidos despegaron de la estación aeronadal de Fort Lothardale, en Florida, para un vuelo de instrucción, pero ahora están en algún lugar de los sean o que ningún no puede determinar. F-28, la nave de Taylor, el veterano instructor del resto de los pilotos, tiene todas sus brujulas rotas y las comunicaciones entre aviones son cada vez más difíciles. La lógica indica volar en dirección al sol como siempre que un piloto está perdido, pero Taylor ordina que las cuatro naves me hausigan por rumbo este. Malita sea, si volamos a lo este podríamos llegar a casa, a lo este malita sea. Pese a que la decisión de teilo no les parece correcta, los cuatro pilotos y sus tripulantes siguen al instructor. El combustible está gochándose. Mientras el viento arrecia y debajo se ve un mare embravesido, se escucha por última vez la radio del F-28. Todos aviones mantenganse cerca. Entremos que amerizar si no tocamos tierra. Cuando el primero baje de 10 galones, todos bajamos juntos. Todos los aviones mantenganse cerca. Entremos que amerizar si no tocamos tierra. Cuando el primero baje de 10 galones todos bajamos juntos.

En la estación aeronaval de Fort Lodder, de todos están con esternados, saben que una merisaje en esas condiciones es prácticamente una sentencia de muerte. En seguida se organiza una misión de rescate, pero con la clara idea de que las esperanzas de volver a ver a los 14 pilotos y tripulantes del vuelo 19 son mínimas.

La búsqueda de ver... Pero con la clara idea de que las esperanzas de volver a ver a los 14 pilotos y tripulantes del vuelo 19,

son mínimas.

La búsqueda de ver a cubrir una gran cantidad de océano,

esa que se conoce como el triángulo de las bermudas. En el episodio de hoy, la desaparición del vuelo 19. Soy Luis Aeglesias.

Yo soy Fernando Santa María.

Sigue la espiral amarilla y mantente enigmático. Queridos enigmáticos, querías enigmáticas, querido fer, como estás. Querida, Luisa, muy bien. Este es uno de los misterios bonitos, consentidos, favoritos tradicionales, pero que además tiene diferentes historias que contar. La gran mitología del trágulo de las vermudas y en esta ocasión el vuelo 19. Exactamente, la historia del vuelo 19. Es un caso que casi está pegado al final de la segunda guerra mundial. Ya saben que va a decirluiza y si no lo saben, va de nuevo siempre que hay eventos de guerra, eventos políticos, eventos canónicos como estos hay eventos paranormales que merodean por ahí que puede ser una respuesta social o que puede ser una respuesta para normal y de eso nosotros nos dedicamos de eso vivimos. Básicamente. A ver, esto sucedió en la zona de las islas Bahamas, el 5 de diciembre de 1945. Para quienes no la tengan presente, las tropas japonesas se habían rendido formalmente el 9 de septiembre de ese año, ¿ok? ¿Cuál es la relación? Va a ver, el vuelo 19 tenía ese nombre porque ese era el número de misiones de instrucción para pilotos y navegantes que se hacían en la estación de la naval de Fort Lothar de End.

Eso después del final de la guerra. Por eso está tan conectado a todo el tema. Los 18 vuelos anteriores no habían tenido demasiado problemas en cumplir esa misión rutinaria, no de entrenamiento en navegación y bombar de ofer. Sí, pues era rutinario, a la ruta se le llamaba problema de navegación número uno y arrancaba con un vuelo de 90 kilómetros en dirección este. Algo que los Avengers les llevaba unos 20 minutos más o menos. Son, una vez muy grandes y muy potentes. Allí los aviones devían descargar sus bombas a baja altitud sobre un blanco de concreto. Una tarea que le llevaba pues otra media hora más o menos, después devían seguir en dirección este durante otros 107 kilómetros, donde girarían para tomar rumbo noroeste durante otros 117 kilómetros. En ese trayecto debían sobrevular la isla granba ama y el recorrido final sería en con dirección o este durante 193 kilómetros hasta volver ya a Fort Lothardale. En total, haciendo cuenta rápidas todo el ejercicio debía durar menos de cuatro horas. Así que los aviones fueron acondicionados con combustible para 5 horas y media y así pues tienes un margen pues para evitar emergencias, también se comprobó que todos tuvieran sus equipos de supervivencia y su instrumental en orden, lo único que faltaba en las aeronaves era el relógico común, que era un aparato que salían robarse los pilotos como recuerdo, pero pues no supone un gran problema porque se suponía que todos llevaban a bordo su relógio de pulso en sus moniecas. Eso me gusta mucho de la navegación, hay como ciertas cosas que no fallen y yo creo que hasta en una época digital, estoy casi seguro si alguien es piloto, por favor, confirme no, llevaste el relógio de pulso porque cuando todo falla sale el sol y el reloj tiene cuerda. ¿Qué vanito eso? ¿Qué vanito esa que acaso es? El pronóstico del clima era favorable, pero se prevía que el mar

pues puede estar... sale el sol y el reloj tiene cuerda. ¡Hichu, sonitos! ¿Qué bonito es? ¿Qué manitos?

¿Qué saca casi?

El pronóstico del clima era favorable, pero se prevía que el mar

pues puede estar agitado cosas que pasan, pues en las mamas. Y mira, el instructor del vuelo 19 era precisamente el teniente Charles Carroll Taylor, que había combatido en la guerra del pacífico y que más tenía más de dos mil quinientas horas de vuelo acumulados, de las cuales

eran que más de seiscientas de bombardeiros avengers, aunque era experimentado, nunca había liderado el problema de navegación número uno, porque acaba de ser transferido desde la base aérea de Miami. Entonces los otros cuatro pilotos tenían un promedio de vuelo de trescientas horas cada uno, con unos sesenta aven. Cuatro de los aviones llevaban dos

tripulantes para que cumplieran un entrenamiento avanzado de combate, mientras que el quinto llevaba uno solo que se acabó al Ankosner, él había pedido ser excusado de la misión y que crees, eso les salvo la vida. Sí, por supuesto. Siempre hay alguien así, digo, no puedo evitar pensar en nuestro el primer episodio de esta temporada del paso diátlo, que también, o sea, hay alguien

que sobrevive por una circunstancia bien fortuita y que os deciente muy afortunado os deciente culpable de la su vida cualquiera las dos síndrome del sobreviviente el teniente Taylor también pidió ser reemplazado porque no quería volar esa misión pero que tal que pues no dio razones suficientes y no no había instructor disponible, entonces la solicitud fue de negata, eso está durísimo, él no quería ir. Como el instructor llegó tarde, los cinco avengers despegaron a las 14 días, a las 2 días, con un piloto en entrenamiento liderando y eitaylor a bordo del F-28 en la retaguardia. Entonces, el regreso estaba previsto para las 17, 23,

para las 5 de la tarde con 23 minutos.

Y aunque todo pareciera bien, a las 15, 40,

ven cantan estas horas militares.

...