No hay a ti que te importa, informarte o divertirte. Si lo quieres todo, la corneta es para ti.

Un análisis poco profundo de la realidad, un programa libre de primicias exclusivas,

información de segundo plato con reportajes de medio pelo, la corneta come,

come, come, come, come, come, come, come, come, come, come,

todos, y lo vi, lo vi, lo vi, lo vi, lo vi, lo vi, lo vi, lo vi, lo vi.

Sí, yo también lo vi, y ahorita no los ve a ustedes, pero lo siento,

me escuchan, me sienten, esto es la corneta. Aquí con el señorito Videgarai

en la corneta, listo para abrindar los a todos lados. Gracias. Una vez más esta porquería.

Gracias por invitarme a tu programa, esta caes, hombre esto siempre estar aquí,

de tu patiño, ya sabes. Ríéndome de tus chistes, aplaudíéndote,

siendo tu mayito, vesales. Somos el patiño en uno del otro, ¿no?

Cuando alguien se enoja en redes sociales, pinche patiño de nos,

a ver, guíes, me siento a platicar con este hueco, como lo he hecho

durante los últimos 40 años, bueno, 30 tantos. Cuarenta, guíes.

Ay, nada más que ahora nos da dinero por hacer, y está bien, es muy bonito,

es muy divertido. A mí me gusta mucho, espero que ustedes también.

Sí, recientemente fuimos a una entrevista a un programa muy popular aquí en México,

que conducen dos amigas nuestras de hace muchos, muchos años, que las queremos y

nos faltaron a todo dar. Y sí, ahí me cañó el 20, y que llevamos

40 años viendo a los diarios, ¡qué horror!

Y si era uno en esta serie de recuento de lo que se ha hecho en este programa,

y si ya es un montón de tiempo, o sea, y luego de más hacía mucho que no nos veían

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