Hola, buenas noches.

¿Mucho gusto que haciéndo?

Aquí, este ha intentado programar y esperando que entre mi y relato.

Oiga, Reina, no está usted cortando el cabello, no la estamos molestando.

No, ya, ya también he trabajado en la mala noche.

Son las dos.

¿Qué pasa?

¿Qué pasa?

¿Qué pasa? ¿Qué pasa? ¿Qué pasa? ¿Qué pasa? y relato. Oiga, Reina, no está usted cortando el cabello, no la estamos molestando. No, ya ya

terminé de trabajar desde la mala noche. Son las 11 y media tiempo de la hora del centro y

todavía voy a seguir chaveando nada, pero mañana sí, verdad es el día bueno, supongo. Sí, lo

fines de semana se me reestaba escodir en cuestión de gente y de trabajo. Exacto, excelente. Tenemos algún, alguna cita para un peinado, quince años.

Sí, relativamente. No mañan exactamente de, pero de mañana,

en ocho, ya hay una cita para grabar, una quinceñera y a su familia.

Oye, Reina, y no habrá modo de que, mire, aquí somos ais nosotros a quien el estáf de lujo que hace posible la transmisión de la mano peludo

no habrá modo que nos pueda conseguir seis bolitos para esa fiesta

pues y me intenciono claro que sí todo lo imposible es posible en esta vida

ya que si no se pueden pues ni modo eh no no no me intenciona que sea ya es más hasta que a mí me lo den también. Porque por supuesto, Norbita, porque usted la buena aquí.

Es verdad, claro que sí,

muevo las diferencias que nos vemos todos.

Ah, nos hablamos, eh.

Claro que sí.

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