Advertencia. Este programa contiene casos de crimen, apariciones, misterio, conspiración y violencia.

El contenido de estas piezas puede ser sensible para algunos miembros del público.

Aconcejamos discrección.

Saludos enigmáticos, bienvenidas, bienvenidos de vuelta a nuestros testimoniales enigmáticos.

Este episodio trata absolutamente de ustedes, de sus historias y de aquello que quizá no se atrevían a contar en otro sitio.

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A raíz de un testimonio que escuchamos aquí en Cavina, nos surgió un inquietud Daniel, un inquietud gigantesca por conocer las historias y experiencias que se vivieron durante la pandemia en confinamiento.

Son experiencias muy fuertes, sucede que la pandemia del COVID-19 lejos de todo lo que ya conocemos de todo lo que ya se ha dicho del peligroso que fue en un principio fue un momento también para la soledad.

No podíamos dejar nuestras casas, no podíamos tener contacto con nadie y esto complicaba un poco las cosas porque a donde se iba cuando nos sentíamos aterrados.

Mucho de esto se relaciona, por ejemplo, con el horror corporal que es un género, digamos, del terror que implica que no puedes escapar de tu propio cuerpo.

Si puedes escapar de lo que sea, pero cuando el horror está o el horror más bien está dentro de tu carne, no puedes subir de él y parte de esas historias tenían mucho que ver con ello.

En este testimonial vamos a conocer algunas historias sobrenaturales que en su momento no pudieron compartirse y que ya tenemos listas para compartir con los inigmáticos.

Mira, tenemos una primera historia que es muy impactante, te la voy a compartir este es el testimonio de David.

¿Qué tal? Me presento mi nombre es David, hoy quiero relatar algo que me sucedió a inicios de la pandemia.

Era el mes de noviembre, prácticamente en vísperas de día de muertos.

En el año 2019 yo había ingresado a trabajar a una empresa de seguridad privada, la cual se encarga de rentar sus servicios a la embajada de los Estados Unidos.

Yo fui asignado a ese servicio en específico.

Se me asignó a la construcción de la nueva embajada ubicada en Polanco en la ciudad de México, más específicamente sobre avenida calzada de legaria y avenida ríosa en Joaquín, muy cerca de plazantara.

Para no hacer el cuento largo, aquel día yo salí tarde del turno pues yo había llegado tarde y me castigaron con irme a la hora que llegué exactamente a las 9 de la noche.

Quien conozca la zona de Polanco y más exactamente del rumbo que ya expliqué, sabrá que esa zona se queda sin gente muy temprano debido a que no es muy segura a pesar de estar bien vigilada.

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