Si escoger bien a tu pareja es una de las decisiones más importantes de la vida, escoger bien a tus amigos. No se queda nada atrás. Van a ser pocos, pero hay que aprender a escoger los como si con ellos también fueras a ir a la guerra. Claro que la forma más odia de aprender a escoger un amigo es cuando tú mismos sabes que lo eres. Los amigos verdaderos no nada más te acompañan en la vida, te definen, te moldean, son

esas personas que te muestran partes de ti que solamente en ellos, tú puedes ver, entonces escoger bien un amigo es decidir quién vas a sostener tu secreto sin convertirlo en un arma. Esa esa persona que sabe cuando callar o cuando romperte, con la verdad, es esa persona que no te deja cómodo con tus excusas. Eso es un amigo, se trata del elegío.

A estas personas que te ayudan a seguir siendo tú, cuando eres tú el que olvida, ¿quién coño es? Entonces la amistad verdadera se renueve en el lodo, en las pedas, en las discotecas. No importa si tu amigo no sabe qué decir cuando tú estás jodido, mientras que se pesta, creme eso suficiente. amigos verdaderos marcan la diferencia diferencia entre rendirte o reconstruirte. Esos son los amigos que te contagian con su forma de ver el mundo, con sus valores, con sus decisiones de hecho, te pueden contagiar hasta de sus miedos o de su coraje. Entonces un buen amigo te leva, te reta, te ayuda, te lleva a crecer, todo lo contrario a que hay que no es tu amigo, a que te distrae, el que te hace perder años y años de tu vida sin que te haya dado cuenta, entonces la amistad no es un lujo, efectivo es una necesidad estructural de la vida misma, un amigo, creo que puedes escribir directamente en tu historia, de hecho va a alterar todo el relato de tu destino, escuje bien a tus amigos, con quien te lleva a soy, como le hago de n'le, recuerda lo siguiente, la amistad, la verdadera amistad, ese es el derecho sagrado a no tener que fingir. O sea, me voy a explicar mejor, donde la sangre no llega, la amistad es la que se encarga de crear la inágio. Me explico, por eso hay hermanos que no nascen de la misma madre,

porque no es necesario, porque hay hermanos que se han gestado por el dolor o por los sueños en común. Vienen a mí me gusta pensar en la amistad, como esos árboles, que no comparten las mismas raíces, pero se unen bajo la tierra como si ellos supieran que sin el otro no van a poder resistir la tempestad o el lugar en donde han sido plantados. La amistad creo que es parecida a la fe. O sea, es creer en alguien más allá de sus pruebas. Entonces, un amigo verdadero va a asumir un riesgo para proteger tu integridad y no por qué se sienta superior sino porque te ama lo suficiente como para no dejarte ser engañado por

tu propia sombra. Sí, te va a confrontar sin reducirte, te va a corregirte y se va a callar cuando sea necesario, ¿eh? Y se va a callar porque te ha visto herido, porque te ha visto sucio, porque te ha visto contradictorio, y aún así se ha quedado. Por eso un amigo no necesitan mil explicaciones no te va a pedir una versión editada de ti esa es la

amistad la amistad que no proviene de un parantesco de personalidad, sino de un parantesco espiritual. De rida, decía que el amigo es aquel, continuó con partes necesariamente lo que eres, sino para quien tu existencia con todo sus errores, sus pliegas tienen un valor irreunciable y a mí me encanta imaginar la amistad así porque así es como se contempla en arte por ejemplo como puede llorar una poesía la amistad es algo que se revela no hay una amistad, si no hay asombro no hay amistad sin deseo o voluntad de descubrirlo infinito en la limitación del otro. Hay amigos con los que no vas a compartir ni al carácter, ni las ideas, los gustos, ni le diología, pero van a compartir una lealtad que no se explica. Y eso queridos es un regalo de Dios, esa gente con la que sin razón evidente elige a cuidarte y tú dejes que el otro te cuide. A veces ni siquiera necesitas entender al otro, al otro le basta con estar contigo. Escoge muy bien a tus amigos, porque en la cima todo el mundo te va a aplaudir. Eso son por ristas, pero en el derrumbé, en esótanos. Ahí es donde muy poco se quedan y deciden alumbrarte con lo muy poco que a ellos les queda. Si tienes amigos

verdaderos cuídalos, bendíselos, amalos, protejelos, eres muy, pero muy afortunado. Gracias a

todos mis grandes amigos.