Y esta semana yo leía un estudio que decía, un estudio serio, que decía que aquellos

que alguna vez lidiamos con la ansiedad existen una palabra que nos pueda tormentar

y esa palabra podría. Nuestro mayor temor es la amenaza de lo que podría ocurrir, pero

que en realidad es un temor ficticio, no ocurre. El temor siempre circula en el campo

de la posibilidad, por eso es más nefasto o incluso circula por el campo de la imposibilidad

porque el temor también es el tirano de la imaginación. Pasamos gran parte de la

vida preocupándonos por cosas que realmente nunca van a ocurrir. Y eso es lo peor, que el

temor nefasto de que algo está mal, está rondando siempre al rededor nuestro y no sabemos

por qué. Esa sensación de decir, por qué siempre estoy preocupado si no tengo porque

en el debe y el a ver de mi vida, todo está medianamente bien. Sin embargo, hay algo

que a veces nos envuelve como una nube, una preocupación. Si alguna vez batallaste contra

el temor, no está solo. El temor no respeta ni estudios académicos, muchos menos

estratos sociales, golpea al débil, al poderoso, atormenta al pobre, al rico, al viejo,

al joven, hasta incluso los que parecen tenerlo todo, las celebridades, los grandes líderes,

los políticos, confiesan tener una amplia variedad de fobias de temores. Que uno pensaría,

bueno, la fobia capaz que o el temor espatrimonio de los que viven en condiciones paupérrimas,

uno no se imagina que el temor también viven verberigils, o que el temor puede vivir

en barrios privados de élite, de élite, pero sin embargo, el temor hace su residencia

en todos los corazones. Jennifer Aniston, por ejemplo, y Wuppie Wolver, que son famosísimas

actrices, tienen aerofobia, no pueden subirse a ningún avión y ambas confesaron que perdieron

grandes contratos por eso, porque no han podido muchas veces trasladar la filmación donde

ellas viven. Entonces, perdieron grandes contratos millonarios, porque no pueden subirse

...