Oye, Martíta. ¿Qué estranyas de México? ¿Cuánto iba a vivir en Fora de México?

Como, creo que 5 o 6 años, más o menos, sino que a lo mejor un poco más. ¿Qué es lo

que más extrañas? ¿Qué extraño de México? Pues extraño mi familia de allá, extraño

mis amigos, allá. La comida, la calidad de la gente. Pero de comida, pero lo que es lo que más extraño, o sea, si yo viviera seis años en

Estados Unidos, no sé qué será lo que más extrañaría, pero tú qué lo que más extrañen

de comida.

¿Sabes qué extraño que sale a la calle y de verdad así sale a la calle y está la señora

del puestito de las quesadillas y te puedes comer una qu está dilla de de que eso con papa o de requezón o de lo que está ahí ahí disponible extraño los tacos al pastor por

ejemplo o sea este ese tipo de bastas y me puso la

la boca a ser los ángeles no estoy en los ángeles y aquí no hay tacos al

pastor hay unos como que lo intentan hacer pero no no les sale y pues mucho menos va a ser encontrar a la señora o el señor que hace

las que salí a ser esquina nombre para nada.

No, ya pete, los celotes, no ya pete, los celotes, los esquíten, los celotes, eso extraño

muchísimo y el sentido de lo humor de los mexicanos somos muy divertidos y muy que eran dones. Claro, es cierto. Es bien, no es otra cultura la verdad, es que es bien, bien.

Oye, si fuera todo el último día de vida, ¿qué desayunarías, qué comerías y qué

escenarías? Y a ver, y qué toda la gente piense eso.

Híjole, ¿qué desayunaría? Yo creo que desayunaría tamales. Ah, de qué? Me encantan los tamales. Unos huevos revuelto con jamón.

También me gusta mucho.

Tamales me gusta mucho los tamales verdes.

Ah, con su poquitura.

Yo ordite, tengo tanta mano comido y tú ya ves tocando rí.

Yo tampoco, ¿eh?

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