Muy bien, en miles de aulas, en miles de aulas de universidades, de facultades, de colegios primarios, secundarios del mundo entero, nuestros maestros, bueno, no nuestros maestros, los maestros, no siempre son nuestros.

Adóctrinan así, ahora sí, a nuestros hijos, con la idea de que no somos más que el producto de un accidente, productos del azar, que el nacimiento de una persona es azaroso, ¿no?

Y por consecuencia, lo que cada uno haga con su vida, incluyendo hasta su orientación sexual, no es una cuestión divina, sino que es una cuestión de preferencia, no existe ningún diseño divino,

enseña que no hay ningún diseño original, y sin embargo la Biblia no se enseña y no se enseño que Dios nos diseño con un propósito en mente.

El salmo 139, 14, dice que somos una creación admirable. Cuando el señor nos terminó de hacer, dijo, ¡Wow, mira qué lindo me salieron!

Bueno, los argentinos que aspas que más lindo que otros, pero cuando ustedes predican pongan el ejemplo que quieran, ¿eh?

Y con el avance de la ciencia, es cuando más deberíamos empezar a entender estas palabras de que somos una creación admirable, no al revés.

Oye, se pensamos que hay una dichotomía entre la ciencia y lo divino. Yo digo, nuestro cuerpo, mismo, es una saña de ingeniería perfecta, un diseño increíblemente complejo que no llegamos a entender.

Solo pensando, digo, en el ojo humano, un diseño tan elegante, se el ojo y complejo que los científicos hasta la fecha no terminan de dislucidar,

nuestro ojo se mueve a un promedio de 100 mil veces cada día, hace su propio auto mantenimiento mientras dormimos.

El ojo tiene enfoque, tiene objetivo, tiene su propio ajuste de apertura automática, brinda imágenes a color, imágenes en 3D, puede funcionar nuestro ojo en total oscuridad y con la luz brillante.

Estaba leyendo que el ojo es capaz de discernir 16 millones de colores que incluyen 70 mil matices de grises.

De hecho el mismo Charles Darwin dijo, supone al que el ojo, Charles Darwin fue el que por mucho tiempo sostuvo que descendíamos del mono.

Si algún día tu esposo le enseña a tu hijo que descende del mono, digle, esa es la familia de tu papá, no la mía.

Charles Darwin dijo, supone al que el ojo con su de mecanismos, de ajuste focal, de luz, de corrección, de defectos cromáticos y eféricos,

se formó de la evolución natural, lo debo confesar, es el absurdo más absoluto, sólo del ojo ni hablar de nuestra piel,

que un sólo centímetro cuadrado de nuestra piel tiene 3000 células sensoriales, 12 sensores de dolor, 200 sensores de alcalor, 700 glándulas sudoríparas,

un metro de vasos sanguíneos, 3 millones de células, ¿estás diciendo yo no sabía que tenía tosonsima? 4 metros de nervios que envían al cerebro mensajes a una velocidad de 320 kilómetros por hora.

Nuestro cerebro pesa 1,5 kilómetros, algunos pesan más, algunos pesan menos, pero 1,5 kilómetros y contiene 12,000 millones de células,

que cada una está conectada con 10,000 células cerebrales más, lo cual implica 120 billones, como decía mi maestra, con v de vaca larga,

millones de conexiones, nuestras moléculas de ADN contienen la información más detallada de todo el universo,

y por supuesto no estoy hablando de la maravillosa teoría de las maravillas de la gravedad, o el sistema solar, o el perfecto equilibrio entre el nitrógeno y el oxígeno de la atmósfera que hace posible la vida terrestre,

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