Es contado esta anécdota en alguna otra ocasión en 1915 Charles Chaplin había ganado

una inmensa popularidad en toda América de modo que surgieron infinidad de imitadores que

recorrian los circos, recorrian los teatros ganándose la vida emulando a este genio del humor

del sinemudo. Y hubo tantos imitadores, parece entonces, que se hicieron que se inventa un

concurso nacional en los Estados Unidos en el que se premiaba al que mejor realizar a

la imitación. Y en una de los viajes que Chaplin hizo a San Francisco le llegó la noticia de uno

de estos concursos y decidió participar, se anotó, sin decir que era el verdadero.

Increíblemente no pasó de la primera ronda, fue rechazado por los jueces de inmediato,

fue sorprendente, la noticia recorrió el mundo, nunca supieron que tenían al real,

al verdadero. Lo que sucedió tiene una razón, el verdadero Chaplin fue hacer del mismo,

entonces se movía de manera normal como lo hacía cada vez que rodaba sus películas,

pero los imitadores se movían mucho más rápido tratando de imitar la cámara rápida del

sinem, y eso causaba mucho más gracia. Chaplin estaba acostumbrado a moverse normal,

la cámara luego lo aceleraba, los imitadores y van acelerados, esto se parecía más reales

que el verdadero, entonces de alguna manera Chaplin fue el primero en estar atrapado en su propio

avatar, o sea que la gente se había adueñado de su imagen y no admitían que Chaplin caminara de

manera real. El avatar digital es una representación de una persona para identificarse en videojuegos

en aplicaciones, uno si no quiere poner las fotos, se hace un avatar mucho más joven, mucho más

delgado y lo ponía ahí. Eso se va a hacer, avarteres, avatares o avatar, generalmente representan el

aspecto físico de la persona, son parecidas, uno lo puede hacer, pero siempre es una superversión

ultra hiper macroextrache mejorada de lo real. Cuando uno velaba tercer amor, cuando ve la

persona real dice, ¿soto? ¿No? ¿Qué pasó? Y volviendo la historia, Chaplin, si quería ser

...