¡Hey! Querido no te vayas porque quiero orar por ti, así es decir, yo quedo a tu minuto,

si se rato os ojos y por favor recibe esta oración con mucho amor en donde te encuentres, ok? Vamos a estar a los ojos, a mano Dios, no quiero vivir un solo día más movido ni por la rutina, ni por mi ego, ni por la vanidad, porque no fui creado para sobrevivir, sino para manifestar en realidad a tu gloria. Así que hoy me dispongo a caminar de acuerdo a tu propósito

eterno en mi vida. Y si hay algo en mí que aún no se ha rendido ante ti, trae la luz. Y si mis planes compiten con los tuyos, te ríbalos. Y si mi corazón se ha distraído, llámalo de regreso. Hazme sensible, por favor a tu voz, hazme disciplinado en tu palabra, pero sobre toda cosa, hazme valiente para ove de serte sin condiciones. Ya no quiero construir nada fuera de ti, no quiero correr hacia puertas que tú nunca abriste. Así que mi tiempo, mis dones, mis palabras, solamente quiero que estén alineados con tu reino. Así que hoy reprendo todo mi orgullo, toda comparación, toda ambición, absurda y vacía, o quiero rendirme, quiero rendirme el diseño que tú pensaste en mí antes de que naciera, en ti tengo todo lo que tengo señor

y fuera de ti no quiero absolutamente nada. Hoy de claro que soy inquebrantable en tu

nombre, en el nombre de Cristo Jesús, Amén y Amén. Yo les daba muchachos, no dejen

nunca, nunca.