Apenas hice un podcast sobre este desmadre del género, binario, masculino, femenino y todo lo que

hay alrededor, todos los matices que se han ido definiendo en los últimos años. Y lo hice un

poco sarcástico, lo hago propósito es parte de lo que me divierte en la vida. Y como les he dicho,

me escucha el que quiere, yo hablo para mí y abro mi podcast. Este me grabo, me vulnerabilizo y

luego me comparto personalidad, pues es para mí. Entonces, este otro podcast vuelvo a hablar del género,

pero pues por ahí siento que a lo mejor también hablar lo serio, despierta alguno que otro. Fíjate

que de entrada te iría si vas a entrar a una conversación, a un argumento o vas a oír este audio,

queriendo ganar, queriendo tener la razón, pues de entrada, entonces la tienes el tema de género

hoy en día, sobre todo en Estados Unidos. Hay gente muy radical, en el día no quiere que le digan él o

ella. Y entonces hay una serie de pues nuevas etiquetas, diría yo, y siento que es muy superficial,

siento que si de por sí quienes tenemos una etiqueta, estamos tratando de quitarnos la y salir

de la caja. De repente, ver un grupo de gente tan fanatizada con, con meterse a una cajita más

chica todavía, más separada de los demás, es tan triste y lógico. En el fondo con todo esto y el

podcast pasado, lo que quiero decir es, todo mundo tiene derecho una vida propia a disfrutar,

a tener sexo con quien quiera, a vestir su avatar, como lo quiera vestir. Por supuesto, sexo

consentuado, por supuesto, sexo consentuado, si es casi se dice, ya no supe. Por supuesto, sexo en

donde las dos personas o más están de acuerdo, tienes derecho a dedicarte a lo que quieras,

sin pisar la libertad ajena. Digamos que vienes a este juego llamado vida y puedes hacer lo que

tú quieras, vestir, te pintarte y llevarte con quien quieras. Y llevarte íntimamente con quien

quieras, pero todo termina cuando quieres que el de enfrente haga algo. El de enfrente es libre igual

que tú. Tú eres muy libre de querer que te llamen ella en lugar de él o ella. Por decir,

algo no sé si existe eso, pero tú puedes querer que te llamen como sea. El otro tiene derecho a

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