Este podcast he traído ustedes gracias a la ayuda del colágeno cual inova y de recarga

rápido. Seguramente era grueso pronto.

Esto no es definitivo.

Me decía mientras abordaba un avión rombo a México.

Mi primer viaje fuera de Cuba.

A otro país.

El primero de muchos.

Pero eso no lo sabía en ese momento.

Sólo que irme era la única opción que encontré por mi bien y el de mi familia. El 13 de noviembre empezaba entonces mi nueva vida, fuera de Cuba, para siempre.

Este episodio es para todos los emigrantes de cuerpo, mente y corazón. El 13 de noviembre del 2008 yo me fui al rincón a cumplir una promesa a San

Lazaro los que me conozcan un poco o me sigan en las redes sociales ahora

aunque soy muy debota de ese santo que además es mi ánel de la guarda y que lo

tengo tatuado en el brazo así que como todo había salido bien o al menos

eso era lo que yo creía.

Como todavía salido bien con mi visa México, me fui a cumplir lo prometido.

Mi mamá, como siempre, me acompañó.

Era muy temprano.

Paramos a comer una pizza de esas gordas de siete pesos con los bordes quemados

y el típico sabor de pisa cubana, que estoy segura que todos mis cotaraños recuerden

¿verdad?

tomamos un carretón de caballo

y con mucho calor y sin tener idea de lo que pasaría minutos después

...