Oigan, a ustedes le sán dicho que no cuando piden matrimonio, cuando le hacen la propuesta de matrimonio a una persona o tú le dijiste que no un bato y como fue que se dio, porque le dijiste que no, llámonos al ano 85, 55, 50, 56, 73.

A mí en las japonesas me han pedido matrimonio.

Ah, que bueno, estaba así, estaba llega.

Ay no.

No, ella pensaba que yo tenía papeles.

Ah, que bueno, a mí me pasó a carnal que en una ocasión, por ejemplo, no fue matrimonio.

Mi caso, pero si le pedí, no viasco.

Entonces, quiero saber que quiero que seas este niño, pero me digo, no, es que mira, yo tengo otros planes, tengo que ser estudiando.

Bien, y pues te voy a pedir el novio, no me estoy casando, contigo.

Es que estás bien feo, tú.

¿Y dónde quedó a Roberto?

Y a Roberto, como macho.

Se quedó en México.

Ese me lo ganaste tú.

Entonces, me acuerdo que digo, porque estaba ahí más alta que yo, carnal.

Todo el mundo estaba en saldo que tú.

Hasta los hormigas.

Hasta los de Guatemala.

¡Arriba Guatemala!

¡Arriba, arriba!

Entonces, ella me digo que no, que no puede ser tu novio.

Ya digo que está bien, también.

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