Hola soy Fries, serios de rano y está escuchando podcast la Vibliera Un año, entonces escuchándolo a vos de Dios y vivimos la vida a través del lente las escrituras. El podcast de la Viblias presentado por Ascension. Usando la coronología de la Vibliera de Grey Adventure, leeremos de dejenes y sasta apocalipsis, descubriendo cómo se desarga la historia de salvación y com si que cajamos especialmente con esta carta de Pedro me llama mucho la atención, porque Pedro quiere llevar la buena nueva más allá de la fronteras y la estás creviendo a los que son del mundo romano, pero que viven en la parte de Asia

y es lo que llamaríamos hoy Turquía. Entonces le está pasando a todas estas comunidades, un mensaje, pues no les está hiendo nada bien, están siendo perseguidos, los vecinos, los ven con buenos ojos, la gente de capa dosia, el punto de galacia, de Vitinia, les están acosando, los tratan de manera fuerte y lo veremos, ahorita en el capítulo 3 y 4 y cómo Pedro los va a animar, les decimieren, el sufrimiento es algo que nuestro maestro vivió que nosotros hemos vivido y él empieza a mostrar que todos ahora tenemos una identidad somos parte de una familia y cuando sufrimos somos parte de esta familia y nos ayuda a que demos testimonio de Jesús. Y así que de aquí en adelante vamos a ver cómo dice ese testimonio va a hacer que su regrese. Así que si tuvo y te sientes exiliado, esta carta también es para ti, si tú te sientes que estás fuera, si te sientes despreciado, perseguido. Hoy el señor nos da esta palabra que nos muestra que a todos los que el señor alige siempre les cuesta un poquito el camino empezando por Abraham y el camino que tenemos que recorrer ustedes y yo no es fácil y tendremos sufrimiento, tendremos persecución, hostilidades pero que tenemos que unirnos como familia y todos somos peregrinos que van buscando el encuentro con Dios.

Entonces, ¿qué nada no desanime y que pensemos siempre que vamos a llegar a encontrarnos en esta vida nueva en esa nueva tierra que ha sido nos aprometido? pues él a través de la resurrección de Cristo nos motiva a nosotros a vivir de una manera nueva.

Sentarnos con el maestro, aprender de él, identificarnos con él, llevar una esperanza a todos los hombres que han sufrido y contarla a todo el mundo que Dios es amor. Oye, qué maravilloso. Vamos a escuchar esto hoy y que ni el sufrimiento, ni la hostilidad, ni los malos tratos, ni la persecución, no se paren de ese amor de Cristo que nuestra esperanza nunca se apague que nadie le apague que nadie le acabe y entonces escuchemos a Pedro, dando ese ánimo. Hoy leyendo primero de Pedro, capítulo 3 al 5, empezamos la carta los a los tres alonescenses, capítulo 1 al 3 y tendremos probar, pues capítulo 30, verso 15 y 16. Vado, estamos muy cerca del final, este es el día 354. Empecemos. Primera Pedro, capítulo 3. Igualmente ustedes, sean subisazas sus maridos para que si incluso algunos no creen en la palabra, sean ganados no por las palabras sino por la conducta de sus mujeres, al considerar su conducta casta y respetuosa. Que su adorno no esté en el exterior, peinados, joyas y modas, sino en lo culto del corazón, en la incorruptibilidad de un Espíritu dulce y sereno. Esto es precioso ante Dios. Así se adornava en otro tiempo la santo de mujeres que esperaban en Dios, siendo sumisas a sus maridos, así o deseo Sara Abraham llamándole es señor.

De ellas se hacen hijas cuando habrán bien sin tener ningún temor. De igual manera, ustedes maridos en la vida común sean comprensivos con la mujer que es un ser más fracil, tributándoles honor como coherederas que son también de la gracia vida para que sus las oraciones no encuentran obstáculo.

En conclusión tengan todos unos mismos sentimientos, sean compasivos, amense como hermanas, sean mis recordidosos y mildes. No devuelvan mal por mal de insulto por insulto, por el contrario, venigan pues han sido llamados a heredar la bendición. Pues quien quiera amar la vida y ver días felices, cuarde su lengua del mal y sus labios de palabras engañosas. Aparte del mal y haga el bien, busque la paz y corre tras ella. Pues los ojos del señor miran los justos y sus oídos escuchan su oración, pero el rostro de Señor contra los que obran el val.

¿Y quiénes harán mal si dice afanan por el bien?

Más aunque sufrieren a causa de la justicia, richosos ustedes.

No les tengan ningún miedo ni se turben. Al contrario, de enculto al Señor, Cristo en sus

corazones, siempre dispuestos a dar respuesta a todo el que les vida a razón de su esperanza, pero hagan no con dulzura y respeto. Mantengan una buena conciencia para que aquello mismo que les echa en cara, sirva de confusión a quienes critiquen su buena conducta en Cristo.

Pues más vale para desear por obrar el bien, si esa es la voluntad de Dios que por obrar el mal. Pues también Cristo para llevarnos a Dios murió una sola vez por los pecados, el justo por los injustos muerto en la carne vivificado en el espíritu. En el espíritu fue también a predicar a los espíritus encarcelados. En otro tiempo, incrédulos, cuando les esperaba la paciencia de Dios en los días en que no he construido el arca, en la que unos pocos, es decir, ocho personas fueron salvados a través del agua a esta corresponde ahora el bautismo que lo salva y que no consiste en quitar la suciencia del cuerpo, sino impedir a Dios una buena conciencia por medio la restricción de su Cristo, que habiendo ido al cielo, está a la 10 de Dios y le están sometidos los ángeles, las dominaciones y las potestades. ¿Ya que Cristo padeció en la carne a hármecete a menos de este pensamiento? ¿Y empadesen la carne? Arroto con el pecado para vivir ya el tiempo que le quede en la carne. No según las pasiones humanas, sino según la voluntad de Dios. Ya es bastante el tiempo que han pasado, obrando conforme al querer de los gentiles, viviendo en desenfrenos, libiandades, desordenes, orjías, enviageces y en cultos ilícitos a los hídolos. Este propósito se extrañante que no corran con ellos hacia ese libertina que desbordado y prerrumpen en injurias. Darán cuenta a quien está pronto para juzgar a vioci muertos. Por eso, hasta los muertos se anunció a la buena nueva para que condenados en carne según los hombres viven en espí espíritu segundios. El fin de todas las cosas está cercano, sean pues sensatos y sobrios para darse a la oración. Entre todo tengan entre ustedes intenso amor, pues el amor cubre multitud de pecados. sean hospitalarios unos con unos con otros sin volvurar. Que cada cual ponga al servicio lo demás la gracia que ha recibido como buenos administradores de las diversas gracias de Dios. Si alguno habla sean palabras de Dios. Si alguno presta un servicio ha haga lo en virtud del poder recibido de Dios

para que Dios sea glorificado en todo por Jesucristo, a quien corresponde en la gloria y el poder por los siglos de los siglos Amén. Queridos, no se extrañen del fuego que ha aprendido en medio ustedes para probarlos. si le sucediera algo extraño, sino alegrese en la medida en que participan en los sufrimientos de Cristo para que también se alegre en jubilosos en la revelación de su gloria? Dichos ustedes, si son injureados por el nombre de Cristo? Pues el Espíto de Gloria, que es el Espíritu de Dios, reposa sobre ustedes. Que ninguno de ustedes tenga que sufrir ni por criminal, ni por ladrón, ni por malhechor, ni por entrometido. Pero si es por cristiano, que no se averguense, que glorifique a Dios por llevar este nombre. Porque ha llegado el tiempo de comenzar el juicio por la casa de Dios. Pues, y comienza por nosotros, ¿qué fin tendrá a los que no creen en el banjello de Dios? Si el justo se salva duras penas, ¿en qué paran el impío y el pecador? De modo que, a unos que sufren según la voluntad de Dios, confíen sus almas al creador fiel haciendo el bien. A los ancianos que están entre ustedes, los exhorto, yo, anciano como ellos, testigo los sufrimientos de Cristo y partícipe de la gloria que está para manifestarse, apaciente en la greita de Dios, que les está encovendada, vigilando no forzados y no voluntariamente según Dios, no por mesquino a fan de ganancia, sino de corazón, no tiranizando a los que les ha tocado cuidar, sino siendo modelos de la greia. Y cuando aparezca el mayoral, recibirán la corona de Gloria, que no se marchita. De igual manera, jóvenes sean sumisos a los ancianos, revístanse de todos de humildad en sus mutuas relaciones, pues Dios resiste a los obérvios y da su gracia a los humildes. Humillense, pues bajo la poderosa mano de Dios para que llegada la ocasión, los ensalce, confiele todas sus preocupaciones, pues él cuida de ustedes, sean sobrios y velen. Su adversario el diablo ronda como león rojiente buscando a quien devorar, resistan le firmes en la fe sabiendo que sus hermanos que están en el mundo soportan los mismos sufrimientos. El Dios de toda gracia, el que los haya vado a ser tan gloria en Cristo después de breve sufrimientos, los restables será, afianzará, robustes será y los consolidará. A él el poder por los siglos de los siglos, amen. Por mí es el varo, a quien tengo por el monofiel les he escrito brevemente, exhortándoles

y atestiguándoles que está en la verdad la gracia de Dios, perseveren en ella.

Lo saludo a la que está en Babilonia, elegida como ustedes, así como mi hijo Marcos.

Saludense unos a otros con el beso de amor.

Paz a todos los que están en Cristo. 1. Tesalonizenses, 1. Pablo Silvano, Índima Teva, a la Iglesia, los Tesalonizenses. En Dios, Padre y en el Siones de Cristo, a ustedes, gracias, y pas.

En todo momento, damos gracias a Dios por todos ustedes, recordándoles incesar en nuestras oraciones. Temos presente ante nuestro Dios y Padre el ofrar de su fe, el trabajo difícil de su caridad, y la tenacidad de su esperanza en Jesucristo, nuestro Señor. Conocemos hermanos queridos de Dios su elección, ya que les fue predicado nuestro abajelio, no sólo con palabras sino también con poder y con el Espíritu Santo, con plena persuasión. Saben cómo nos portamos entre ustedes en atención a ustedes. su parte parte, si hicieron imitadores, nuestros y del Señor, abrazando la palabra con gozo del Espíritu Santo en medio de muchas tribulaciones. De esta manera se han convertido en modelo para todos los creyentes de Macedonia y de Acaya. Partiendo de ustedes en efecto, ha resonado la palabra al señor y su fe en Dios se ha difundido, no sólo Macedonia y en Acalla, sino por todas partes de manera que nada nos queda por decir. Ellos mismos cuentan de nosotros cuál fue nuestra entrada a ustedes y cómo se convirtieron a Dios tras haber abandonado los ídolos para servir a Dios, vivir verdadero y esperar así a su hijo de Sus que ha de venir de los cielos a quien resucitó dentro de los muertos y que nos salva de la ira venidara. Bien, saben ustedes hermanos que nuestra hida a ustedes no fue a Esterel, sino que después de haber padecido

sufrimientos e injurias en Filipos, como saben, confiados en nuestro Dios, tuvimos la valentía de predicarles el Evangelio de Dios entre frecuentes luchas. Nuestra exportación no procede error, ni de intenciones de duosas, sino que así como he sido juzgados aptos por Dios, para confiarnos en la majélio, así lo predicamos, no buscando agrada los hombres sino a Dios que examina nuestros corazones. Nunca nos presentamos, bien lo saben con palabras, aduladoras, ni compred textos de codicia, Dios es testigo, ni buscando glorio humana ni de ustedes ni de nadie. Aunque pudimos imponer nuestra autoridad por ser apóstoles de Cristo, nos mostramos amables con ustedes como una madre cuida con cariño de sus hijos. Tanto los queríamos que estábamos dispuestos a darles no sólo el Evangelio de Dios, sino nuestras propias vidas. ¿Han llegado a hacernos entrañables? Por recuerden hermanos nuestros trabajos y fatigas. Trabajando día y noche para no ser grabosos a ninguno de ustedes les proclamamos el Evangelio de Dios.

Usted son testigos y Dios también de cuán santa justa e irreprochablemente nos comportamos con ustedes los creyentes. Como un padre a sus hijos, así también a cada uno de ustedes los exhortábamos y animábamos exigiendoles vivieran de una manera digna de Dios que los ha llamado a su reino y gloria. De ahí, que también por nuestra parte no se se motodar gracias a Dios porque al recibir la palabra de Dios que les predicamos, la acogieron no como palabra de hombre, sino cual es en verdad, como palabra de Dios que permanece activa en ustedes los creyentes. Porque ustedes ustedes hermanos han seguido el ejemplo de la ciclesia de Dios que están en Judea. En Cristo Jesús, pues también ustedes han sufrido de sus compatriotas la misma cosas que ellos, de parte de los judíos. Estos son los que dieron muerte al Señor y a los profetas, y los que nos han perseguido a nosotros. No agrada a Dios, y son enemigos de todos los hombres, impidiendonos predicarlo gentiles para que se salven. Así van colmando constantemente la medida de sus pecados. Pero la ira descargó sobre ellos con vehemencia. nosotros hermanos. separados de ustedes por breve tiempo físicamente, mas no con el corazón, anciábamos ardientemente ver su rostro. Por eso quisimos ir a ustedes. Yo mismo Pablo lo intenté una y otra vez, pero Satanás nos lo impid Pues, ¿quién si no ustedes puede ser nuestra esperanza a nuestro gozo, la corona de la que nos sentiremos orgullosos ante nuestro señor Jesús en su venida? Sí, ustedes son nuestra cloria y nuestro gozo, por lo cual no pudiendo soportar más, decidimos quedarnos solos en atenas y les enviamos a Timoteo, hermano nuestro y colaborador de Dios en el banjero de Cristo para afianzarlos y darles ánimo en su fe, para que nadie vacile en esas tribulaciones. Bien saben que este es nuestro destino, ya cuando estábamos con ustedes, les predecíamos que íbamos a sufrir tribulaciones. Y es lo que ha sucedido como saben. Por lo cual, también yo no pudiendo soportar, llamas, lo envié para tener noticias de su fe. No fuera que el tentador lo subiera atentado y que nuestro trabajo quedara reducido a nada. Nos acababa de llegar

de ahí, Timoteo, y nos ha traído buenas noticias de su fe y su caridad. Y dice que conservan siempre buen recuerdo en nosotros y que desean vernos así como nosotros a ustedes. Así pues hermanos, hemos recibido de ustedes un gran consuelo motivado por su fe en medio de todas nuestras congojas y tribulaciones. Ahora sí que vivimos pues permanece en firmes en el Señor y cómo podremos agradecer a Dios por ustedes por todo el gozo que por causa suya experimentamos ante nuestro Dios. No cheidía le pedimos insistentemente poder ver su rostro y completar lo que falta a su fe. Que Dios, mis buen nuestro padre y nuestro Señor Jesús, orienta en nuestros pasos hacia ustedes. En cuanto a ustedes, que el Señor le salga a progresar y sobreabundar en el amor de unos con otros y en el amor para

con todos, como es nuestro amor para con ustedes, para que se consoliden sus corazones con santidad

irreprochable ante Dios, nuestro padre, en la venida de nuestro Señor Jesucristo, con todos sus

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